lunes, 5 de enero de 2015

Grecia y la paradoja del fin de la democracia

En Grecia se da la paradoja de que localizamos el nacimiento de la democracia. Si esa palabra que, actualmente, sirve para camuflar la dictadura de esos seres oscuros que llamamos "los mercados", de manera que controlan nuestras vidas y nos empujan cada día más a la miseria y pobreza.

Como decía, este lunes esos poderosos mercados se habrán puesto nerviosos, al ver que la cuna de la democracia (la originaria que daba el poder al pueblo), va a poner a prueba el sentido de la democracia y el miedo hacia los mercados y sus represalias, en las futuras elecciones de Enero.
De esta manera, los ciudadanos helenos deberán elegir entre ser gobernados por los que les han conducido a la miseria, a la pobreza, a la desesperación y les han vendido sus vidas a cambio de morir de desesperanza, con los bolsillos vacíos y frío en los huesos. O por el contrario, pueden votar algo nuevo. Una nueva izquierda que pide que la política esté al servicio de los ciudadanos (como idearon los viejos griegos) y que esta misma sea usada como instrumento para servir al pueblo que ha elegido a los políticos y no sirva a esos oscuros seres "los mercados" que solo buscan seguir lucrándose, a costa de nuestras miserias.

Por ello, no tardaremos mucho en ver mensajes del FMI, de la UE, del BCE o de Merckel "aconsejando" a los griegos que lo prudente es votar más miseria y más recortes, para seguir viviendo del hambre y del frío, sin futuro y sin esperanza.

Así, en estas próximas elecciones todos nos jugamos el verdadero valor de la democracia. Los griegos tienen que elegir entre la democracia que debe servir al pueblo que idearon sus antiguos o la democracia secuestrada que sirve al FMI a costa de empobrecer los pueblos.
Marcando, en consecuencia, el camino que señalará el final de la democracia que ellos mismo idearon, para servir al pueblo o fortaleciéndola y dándole más valor frente a la dictadura de la economía brutal y capitalista que quiere acabar por secuestrar sus últimos derechos.

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